21.4.09

CARTA A UN N.N.:

Un día me escaparé a la playa contigo.
En la noche caminaremos por la playa, oyendo las olas pegar contra la costa, y hablando en silencio todo de lo que tenemos que hablar.
Nos acostaremos en la playa y diré que la arena está sobrevalorada, que son solo piedras muy pequeñas. Y tu me pedirás que te muestre las constelaciones que conozco. Asi darán las 3 de la mañana en tu reloj.
Y en la mañana tomare una foto perfecta del amanecer que entrará por la ventana y se colará en tu pelo mientras duermes. Te robare el alma en esa foto, por simple codicia.
Será ese mi tesoro más preciado y nunca nadie vera la foto perfecta que te tome, en nuestro idilio de amor.

Luego cuando volvamos a nuestras vidas, solo nos acordaremos el uno del otro, recordando la playa donde todo pasó. Cerraremos los ojos y veremos todo el mar en primavera, como dice aquella canción. Pensaremos en nuestro sueño de un sol y de un mar, y de una vida peligrosa, así como dice la canción.
Te pensare, solo mientras nos encontramos de nuevo en nuestra tierra prometida.
Es bonito pensarte. Es bonito pensarte mientras camino, mientras leo, mientras llueve, mientras sueño. Es bonito pensar que me piensas.
En bonito sentir esto, me hace mal tanto como me hace bien.

MUY AL ESTILO CADÁVER EXQUISITO

MUY AL ESTILO CADÁVER EXQUISITO

“ Y se muy bien que no estarás.
(…) No estarás en mis sueños,
en el destino original de mis palabras,
ni en una cifra telefónica estarás,
(…)me pararé en la esquina
a la que no vendrás
y diré las cosas que sé decir
(…)y cuando piense en ti
pensaré un pensamiento
que oscuramente trata de acordarse de ti.”
CORTÁZAR

¿En qué momento fue?
En que momento te hiciste tan necesario.

Abra sido en el cadáver exquisito, muy al estilo surrealista.
Muy al estilo, tuyo, muy al estilo mío.
Lo recuerdo, lo recuerdo muy bien.
Como recuerdo,
El té hedonista
La atención que ella se merecía por narcisista.

Abra sido en la cajetilla entera que nos fumamos tu y yo,
En el momento que preguntaste, “¿Por qué fumas tanto? ¿Nerviosa?”
Y yo te mire, a los ojos, tratando de buscar a través de ellos algo. Y dije “no para nada. Ansiosa. Y tu ¿nervioso?”
Y me miraste con esos ojos, y me hablaste con esa boca exquisita, “no para nada. Ansioso.”
Y dije “¿ de qué?” y con esa sonrisa dijiste “ no hay contra pregunta”.

Abra sido en el beso, muy al estilo Magritte, muy al estilo cielo triste.
En ese beso, donde mi música dejo de sonar y el reloj dejo de hacer su tic tac.

Abra sido en la frase, muy al estilo Bennedetti.
No congeles el júbilo.
La recuerdo bien.
Pronunciada, por tus labios que no dejaban de darme besos.

Abra sido en el adiós, te quiero.
Muy a tu estilo.

Pero, sé muy bien que ya no estarás, pero igual me pararé en la esquina a la que se, no vendrás. Muy al estilo Cortázar.
Comenzara la maquina del desamor. Espero.
Si está averiada, seguiré acordándome de tu mirada, de tu beso, de tus palabras, de tu abrazo, de tu olor. Imaginándote en cada esquina, cada cama, cada calle, cada lugar.
Y eso mi querido amigo, es el sabor a desespero que se merece el amor.